Así se aprecian las tres cumbres o “picachos”, desde la vía Maitiruma
- Una montaña de 130 millones de años con cinco pisos bióticos a lo largo de 830 metros de altura
- Científicos, turistas y amantes de la naturaleza, escalan los empinados senderos que llevan hasta la verde planicie que la corona
- Fue declarado monumento natural en 1972
LUIS AULAR LEAL
Fotos: Yunio Lugo y Oniel Gómez
Monumento natural, atractivo
turístico y tesoro geológico. El cerro Santa Ana es uno de los principales
atractivos turísticos para propios y visitantes. Es escalado por unas 700
personas cada mes y dos o tres veces más en temporada alta. Lamentablemente, muchos
de quienes lo suben, arrojan basura en los senderos y estampan grafitis en sus
rocas milenarias.
José Núñez, uno de los
guardaparques, explica que para cuidar algo “hay que quererlo primero”, por lo
que se hace necesario educar a la población sobre el tesoro biótico y geológico que por milenios ha resguardado la singular montaña.
De “monte alto” a Monumento Natural
Una vez descubierta la península
para el mundo occidental el 9 de agosto de 1499, la primera referencia del cerro Santa Ana, se
plasma en el mapa que Juan de La Cosa elabora en el año 1500. En él, se grafica
una rudimentaria silueta de Paraguaná en la que se ubica un monte alto.
Mapa de la costa venezolana realizado por Américo Vespucio en 1500. Tomado del libro Paraguaná, de los profesores Carlos González Batista y Graziano Gasparini
Históricamente esta empinada
montaña ha sido propiedad del Estado, cuestión que la diferencia del resto de resto
de Paraguaná, dividida en posesiones. Desde el 14 de junio de 1972, el cerro Santa Ana es oficialmente Monumento Natural, por decreto número 1.005 del
entonces presidente de la República, doctor Rafael Caldera.
- ¿Qué es un monumento natural?
- Según la Convención para la
Protección de la Flora, Fauna y Bellezas Naturales de los Países de América, se
define como Monumento Natural a aquellas “regiones, objetos, especies vivas de
animales o plantas de interés estético o valor histórico o científico, a los
cuales se les da protección absoluta. Se crean con el fin de conservar un
objeto específico o una especie determinada de flora o fauna, declarándolos inviolables,
excepto para realizar investigaciones científicas, debidamente autorizados o
inspecciones gubernamentales”.
Esto le otorga al Cerro Santa Ana,
una condición especial y lo convierte en el único monumento natural del estado
Falcón.
Relieve y geología
Por siglos, ha servido como guía a los navegantes y en la medida que se bordea su perímetro, cambia la silueta ante la vista del espectador. Desde
Santa Ana o Buena Vista parece un “gran durmiente”; desde Baraived, se observa
como una gigantesca pared basalto y desde Yabuquiva o Punto Fijo, el perfil
volcánico lo convierte en el “Vesubio” paraguanero, como afirmó el navegante
Américo Vespucio.
Entrada de uno de los senderos conduce a la cima (Moruy)
Tiene además tres picos o “pichaches”; el de Moruy (el más
alto de todos), Santa Ana (el medio) y Buena Vista (el más pequeño de los
tres). Geológicamente, los especialistas lo han dividido en tres zonas: El
Complejo Subvolcánico estratificado de Santa Ana; Complejo Ultramáfico Zonado
de Tausabana y el Complejo Zonado Gabro Anortositico de Siraba-Capuana.
Pisos bióticos, especies animales y petroglifos
A medida que se va ascendiendo el
clima y los ecosistemas van variando de xerófito, pasado por Matorral Antillano
hasta el Pseudoparamero, un piso biótico muy similar al que se encuentra en los
andes, tanto por la temperatura, como por las especies vegetales que crecen a
ese nivel de la montaña.
Cunaguaros, venados, guacharaca, mapurite, cachicamo, serpientes, gavilanes y el ratón mochilero, (autóctono de Paraguaná) son parte de las especies animales de que lo habitan.
Cunaguaros, venados, guacharaca, mapurite, cachicamo, serpientes, gavilanes y el ratón mochilero, (autóctono de Paraguaná) son parte de las especies animales de que lo habitan.
El monumento natural visto desde “Chamuriana”, lugar donde según la tradición histórica, se originó el poblado de Santa Ana
La existencia de petroglifos,
especialmente por el sendero de Misaray, donde se encuentra la llamada “Piedra
del Calendario” y otras demostraciones gráficas sobre roca son evidencia de la huella caquetía en territorio peninsular.
Recomendaciones de Inparques para subir el Monumento Natural Cerro
Santa Ana
- Notificar a las autoridades del Instituto Nacional de Parques (Inparques), en sus estaciones ubicadas en Santa Ana y Moruy.
- Seguir los senderos establecidos de Santa Ana y Moruy, para no dañar la capa vegetal.
- Se sugiere utilizar ropa ligera, calzado cómodo y llevar abundante hidratación.
- Por el sendero de Santa Ana, solo se permite subir hasta los 700 metros.
- Se prohíbe hacer fogatas, extraer especies animales o vegetales. También se prohíbe el uso de armas de fuego.
- El horario de ascenso está comprendido de 7:00 a 9:00 a.m. y el de regreso a las 3:00 p.m.
- Es recomendable llevar bolsas para recoger la basura que se genere durante el paseo.
- No se permite pernoctar en el cerro.